Somos creadores de realidad
Ahora que las líneas de tiempo cambian de manera tan acelerada, el tiempo de manifestación en la materia, encuentro que es mucho más ágil también. Así que conviene estar atentos a lo que estamos sintiendo o pensando, pues eso será lo que en breve crearemos.
Para ello también te aconsejo tener en cuenta algunas cosas importantes:
1. Reescribir tu identidad. Todos tenemos un personaje, un papel y actuamos conforme a él. Si no te gusta, cámbialo. Escribe como es tu identidad. Visualiza creativamente qué cosas hace ese personaje en su vida, qué escucha, qué siente, dónde va… Dedica unos minutos a la Visualización Creativa.
Escribe tus mantras y repítelos por un mes en determinado momento del día. Ejemplos: «yo soy una deportista», «yo soy alguien que se da su propio valor», «yo soy la mujer de mi vida», etc.
2. Observa los beneficios secundarios de tener que padecer. A veces, no creemos merecer lo que deseamos por diferentes motivos, a veces para que nos hagan caso, a veces para ser leales a las ideas de otros y ser aceptados, a veces por pensar que somos pequeños y que así nos proporcionarán protección, etc. Procura reescribir el guión, con un protagonista libre de miedo a perder.
3. Elige hacer cosas que disfrutes, pero que principalmente tengan consecuencias que tu «yo del futuro» te vaya a agradecer. La satisfacción inmediata a veces habla más de adicción que de verdadero disfrute. Es tiempo de reeducarse, siendo amable con uno mismo.
4. No te culpes por vibrar bajo a veces. Simplemente recupérate en tu centro lo antes posible. Sé amable contigo, no te castigues. Medita concentrándote en tu pecho, en la zona del corazón, re-conecta contigo.
5. Cuida tus hábitos.
Para ello estemos atentos de lo que consumimos:
- Elige vivir bajo la luz del sol, cuida tu ritmo de sueño y descanso. (Y una mala noche la tiene cualquiera, no le des mayor importancia).
- Elige principalmente alimentos que hayan crecido gracias a la luz del sol: vegetales y frutos.
- Hidrátate bien (el agua facilita los cambios internos).
- Toma unos minutos de luz solar al día.
- Haz algo amable por otros. Simplemente preguntar genuinamente «¿cómo estás?» y escuchar con atención, hace milagros.
- Haz ejercicio, da vigor al corazón, transpira. (Aunque solo sea dar saltos mirando hacia arriba por medio minuto).
- Pasea por la naturaleza, siéntate (y siéntete) sobre la tierra lo más que puedas.
- Da y recibe masajes, cuida de tu piel con cariño.
- Conecta con personas que amas de manera sensorial (risas, caricias, abrazos, baile, sensualidad, etc.)
- Sonríe, aunque sea debajo de una mascarilla o tapabocas. (Sonreír le pide a tu cerebro un cambio de neurotransmisores, que harán su magia).
- Escucha música que alegre tu espíritu. Canta y baila.
- Crea, ¡saca al artista que llevas dentro!
- Desintoxícate de terror y dramas (noticias, conspiroparanoias, televisión, series y películas).
- Potencia el sentido del humor: haz buenos chistes, cosquillas, mira comedias, procura sacarle el lado positivo a cada situación.
- Haz buenos deseos para otros y más con los que nos cuesta (con los que no nos agradan). Todo un arte lo sé, ¡pero no sabes qué potente es! (Pues tu subconsciente no entiende la separación entre tú y los demás y si deseas el bien a otro, lo estarás deseando para ti. Así que hazlo con la intención correcta).
- Atiende a otros desde tu estado de presencia (no pretendiendo salvarles) y haz buenos deseos para ellos también, para que encuentren solución de la mejor manera (dales tu voto de confianza de que son capaces, sumando así tu voluntad a la suya).
- Busca información positiva que hable de «crear para crecer a mejor». Unos lo llaman “La Nueva Tierra”, a mi me gusta llamarlo “El Jardín de la Humanidad”.
Disfruta del Viaje
Desde Mi Ser – Silvia Gutiérrez
TerapiaSaludEmocional.com